A pesar de lo anunciado por estos lares, el 27 de noviembre no hubo pase de los sub-13 del Kosner CHH en Huarte. A cambio, salimos a una mañana de hockey en Jaca el día 26 y a un partido en Donosti el día 3 de diciembre.
En Jaca mucho tute, cuatro partidos contra el CH Jaca, CHH Txuri Urdin, CD Bipolo y Milenio Panthers. Eran a lo ancho, y solo dos tiempos de 12 minutos por partido, pero como es costumbre en estas edades, al final se acumulan los minutos en el hielo.Noventa y seis, por concretar, ya os hago yo la cuenta.
Nada más empezar, plato fuerte contra los locales. Ya los vamos conociendo, a fuerza de jugar, y en el primer tiempo conseguimos hacerles frente. En la segunda parte no nos perdonaron algún despiste y nos tocó recoger pastillas de dentro de nuestra portería. A renglón seguido otro viejo conocido, el Txuri. Y otra vez empezamos muy bien para desinflarnos poco a poco a medida que el partido avanzaba.
Después jugamos contra el CD Bipolo, que resultó menos complicado, y nos permitió tomar algo de aire antes de la pausa larga. Terminamos la ajetreada mañana contra Milenio Panthers, y pudimos marcharnos con buen sabor de boca. Buen desempeño de nuestros querubines, que dieron buena cuenta de unas cuantas pizzas después, para celebrar o algo.
Venga esa foto, que tenemos hambre
Apenas una semana después nos invitó el CHH Txuri Urdin a un amistoso en Donosti. Por allí suelen tener un huequecito para nosotros en diciembre, y este año ni covids ni riadas lo impidieron. Fuimos con los justos, dos líneas enteras, pero peleones como vienen acostumbrando.
Preparados, listos, …
Los entrenadores de ambos equipos pergeñaron una emboscada para los chicos y chicas en forma de cambios al vuelo (novedad para casi todos) y tres tiempos de quince minutos (cuarenta y cinco en total, este es más fácil).
Y salieron al hielo a darlo todo, y todo lo dieron. Quedó un partido muy chulo, con los nuestros haciendo bien todas las cosas que les decía Edu desde el banquillo, cambiando con más orden de lo esperado, y sobre todo con un gran espíritu colectivo: todos defendiendo, apoyando unos a sus compañeros cuando los desbordaban, atacando en bloque también, sin ceder cuando los locales apretaron más al final del partido…
…Y sobre todo, no dejéis que tiren
¿Era así como había que hacerlo, Edu?
Otra vez (dos más, en realidad, que he ahorrado papel juntando dos crónicas en una) que los sub-13 dan espectáculo del bueno. Seguidles la pista y os divertiréís, como nos divertimos los fieles.
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